Un análisis internacional ha demostrado cómo el humor, utilizado como auténtica terapia hospitalaria, alivia los síntomas de ansiedad, estrés y depresión en pacientes crónicos de larga duración, como niños que acaban de ser operados o incluso ancianos ingresados en residencias. La investigación se realizó a nivel internacional y se publicó en la revista "Brain and Behavior".
Básicamente, se trataba de una revisión de la literatura existente (estudios cuantitativos, cualitativos y mixtos). Así, además de los trabajos ya existentes, se incluyeron hasta 29 artículos, con 2964 participantes, realizados en nueve países diferentes, como Estados Unidos, Australia, Italia, Turquía, Corea del Sur, Irán, Israel, China y Alemania.
Según los autores del estudio, la mayoría de los pacientes afirmaron que la terapia del humor tenía efectos positivos en la reducción de la ansiedad y la depresión, frente a un pequeño número de sujetos que consideraron insignificante este enfoque.