¿Por qué nos apetecen dulces después de comer? Hay varias razones, pero una cosa sigue siendo cierta: un antojo frecuente de dulces podría arruinar todos tus esfuerzos por alcanzar el peso con el que sueñas.
¿Por qué nuestro cuerpo nos obliga a hacer algo que en realidad no queremos y no necesitamos? A menudo no es más que un hábito, que podemos tener desde la infancia, y desde luego no es fácil luchar contra él. Pero en algunos casos el ansia de dulces puede ayudarnos a descubrir dónde se ha cometido un error en nuestra dieta.
¿Cuáles son las razones más comunes para tener antojo de dulces inmediatamente después de comer?
Echa un vistazo a la galería para descubrir las tres razones más comunes y algunos de nuestros consejos para mantener bajo control el antojo de dulces después de comer.
¿Por qué nos apetecen dulces después de comer? Hay varias razones, pero una cosa sigue siendo cierta: un antojo frecuente de dulces podría arruinar todos tus esfuerzos por alcanzar el peso con el que sueñas.
¿Por qué nuestro cuerpo nos obliga a hacer algo que en realidad no queremos y no necesitamos?
A menudo no es más que un hábito, que podemos tener desde la infancia, y desde luego no es fácil luchar contra él.
Pero en algunos casos el ansia de dulces puede ayudarnos a descubrir dónde se ha cometido un error en nuestra dieta. ¿Cuáles son las razones más comunes para tener antojo de dulces inmediatamente después de comer?
Para nuestro cerebro es más fácil seguir viejos hábitos que adaptarse a otros nuevos. Así que es normal que si estamos acostumbrados a premiarnos con dulces después de cada comida, nos resulte muy difícil evitarlos de repente.
Puede que debido a la dieta hayamos decidido reducir nuestras raciones. Pero no es una solución porque de esta forma la hormona de la saciedad no se ha silenciado y seguirá deseando alimentos ricos en calorías.
Los hidratos de carbono simples y los hidratos de carbono con un índice y una carga glucémica elevados se digieren con rapidez, elevan rápidamente los niveles de azúcar en sangre y, por tanto, provocan debilidad por los dulces.
¿Cuáles son los consejos para reducir las ganas de comer dulces después de una comida?
He aquí algunos consejos para mantener bajo control el ansia de dulce después de comer.
Comer demasiado rápido no es una buena idea. Cuando comemos deprisa, sentimos hambre mucho antes que cuando comemos despacio. Por lo tanto, tómese siempre el tiempo suficiente para comer y concéntrese en masticar bien los alimentos.
Intente consumir la cantidad recomendada de fibra al día (25 g para las mujeres y 38 g para los hombres). Lo ideal es elegir hidratos de carbono como las legumbres, los cereales integrales y las verduras, que se digieren más lentamente y requieren menos insulina.
Intenta evitar comprar dulces para llevar a casa (ni siquiera "para invitados"). Si no están ahí, ¡será más fácil no comérselos!